Ahhh, los monstruos...
Siempre presentes, siempre disponibles cuando tu mano comienza a dibujar sin saber qué, vagando sin sentido por la hoja, inconscientemente trazando clichés bestiales, hocicos largos, garras y lo que se venga a la mente en el momento, para terminar construyendo aquellos entrañables adefesios que abundan en las croqueras.
2 comentarios:
HOla pasada de moustro !!!!!! me fascino los colores...
me gusta este!
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